Los pulpos tienen un cuerpo blando por lo que pueden alterar rápidamente su forma, permitiendo que sean escurridizos y puedan meterse a través de pequeñas grietas.
Utilizan el sifón tanto para la respiración como para la locomoción, expulsando un chorro de agua. Cuentan con un sistema nervioso complejo y una vista excelente y se encuentran entre los invertebrados más inteligentes y de mayor diversidad conductual.
Habitan diversas regiones del océano, como los arrecifes de coral y el fondo marino; algunas especies viven en la zona intermareal y otras en la abisal.