Piscis es el signo de la evasión: cuando se siente invadido de problemas, se desconecta y se pierde en un mundo mejor. Es afectuoso y dulce e intenta seguir así en situaciones difíciles. Cuando se la ve venir, escapa al menos, con su imaginación. Cuando el conflicto pasa a mayores y no puede escabullirse, simplemente explota.
Los enojos de este signo son muy violentos, de mucha bronca contenida y también inesperados, porque te acostumbran a su sonrisa y no a reacciones tan bruscas. Entonces, los piscianos pueden hacer los comentarios más hirientes que te imagines, desparramar insultos y barbaridades, pueden darse la cabeza contra la pared o revolearte con algo. Piscis, el signo más compasivo, cuando está enojado puede ser el más desconsiderado.
Es preferible que te mantengas alejado. Esa tempestad, no suele ser larga y piscis pronto vuelve a su estado habitual para más tarde, poder hablar o sencillamente, dejarlo así.