Aries es un signo de temperamento apasionado y cuando se enoja provoca una tempestad. Si la pelea es contigo, no se callará y te cantará (o te gritará) las cuarenta sin tapujos. Si el asunto es de gravedad, prepárate porque enfadado no conoce la diplomacia. Hasta que no haya descargado toda la adrenalina no entrará en razón. Tendrás que esperar a que se haya calmado para argumentar o disculparte ya que todo terminará peor si te pones a discutir.
Un consejo: déjalo solo o por lo menos retírate…tu presencia le recordará todo lo que le has hecho constantemente.
Cuando se haya enfriado, podrás dialogar sin problema y hasta te pedirá disculpas si se ha equivocado o por su exagerada reacción. Los arianos no suelen guardar rencor.